domingo, 11 de febrero de 2007

DIOS NOS ESPERA

Las lecturas de este domingo 11 de febrero son: Jeremías 17, 5-8; 1 Corintios 15, 12. 16-20; Lc. 6, 17. 20-26 .

El texto de Lucas, del evangelio de hoy, y su paralelo de Mateo nos presentan ¨la Carta Magna¨ del Reino de Dios; los gozos y las esperanzas de quienes acepten en su corazón las Palabras de Cristo. Hemos de estar conscienes que estas palabras no son un proyecto que se pueda realizar en un mes o un año; son más bien un proyecto de vida para nosotros como individuos y sobre todo como comunidad de fe.

Si ponemos atención, la dicha que proclama Jesús es por lo que llegará y no tanto por lo que se está viviendo en el momento. Es decir, los hambrientos son dichosos ¨porque serán saciados¨, y los que lloran ¨porque reirán¨. De tal manera que el gozo y la dicha se fundan en que por la fe en Jesucristo, las estructuras sociales cambiarán, la justicia y la solidaridad se impondrán.

Pero, qué difícil es pronunciar estas palabras hoy en día; dos mil años han pasado y en realidad poco de esto ha sucedido. Vemos todavía a la gente morir de hambre, a los que sufren hacerlo sin esperanza, y a los pobres cada vez más pobres. ¿Quién ha fallado? ¿Jesús, que pecó de idealista? ¿O nosotros que no hemos abrazado con entereza nuestra fe para hacer realidad estas palabras. Hoy hemos de recordar que la Palabra de Dios necesita de nuestras manos, sus bendiciones no ¨caerán del cielo¨ sin que el obrero haga su trabajo. Son nuestras manos y nuestras vidas las que el Señor necesita para que los pobres, los hambrientos y los que lloran encuentren vivas estas palabras. Son nuestras voces y nuestras acciones las que Dios está esperando para realizar su Palabra.

Cuidado con vivir como si nadie necesitara de nosotros; como si nosotros no necesitáramos de nadie; pues entonces estaremos viviendo como ricos, hartos de nuestras ¨falsas riquezas¨ y ciegos ante nuestro hermano. Si aplicáramos estas bienaventuranzas podríamos decir: ¨Dichosa tú mujer que tendrás siempre quien te escuche; dichosos los hombres que encontrarán siempre consuelo y esperanza en su hogar, dichosos los hijos que tendrán unos padres que los respeten y les dediquen tiempo¨. Pero, ¿quién hará realidad estas bienaventuranzas sino sólo ustedes? ¿O están esperando que venga el ¨príncipe azul¨ y la prncesa soñada para hacerlas realidad?

Si somos sinceros, todos se han casado soñando en algo parecido a esto, pero muchas veces no se ha logrado, porque han querido que alguien más lo venga a hacer por ustedes. Lo mismo nos pasa con nuestra fe. Nadie, sino sólo nosotros, la podemos hacer realidad; nadie, sino sólo nosotros podremos hacer que Cristo no haya hablado en vano. Acerquémonos a Él y pidámosle ayuda para realizar esta gran tarea que nos ha dejado de construir su Reino.

Qué lugar ocupa en tu vida la afirmación:
¨Dichoso tú cuando sufras, porque Jesús te confortará. Solo tienes que creerlo y confiar.¨
¿La crees? ¿Confías? ¿Has experimentado ya su poder? Danos tu testimonio.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ayer domingo el Padre Ricardo nos habló de lo que es un verdadero creyente.

Para el Profeta Jeremías el verdadero creyente es el que pone toda su confianza en el Señor.

El Apóstol Pablo nos dice que el verdadero creyente espera a un Dios vivo, RESUCITADO, que al vencer la muerte nos lleva a vencer todo y a declararnos en Victoria.

El Señor nos dice el verdadero creyente estará siempre DICHOSO no imorta lo que suceda en nuestra vida, ni por el momento que estemos pasando porque el verdadero creyente tiene la confianza, la seguridad, de que Dios se está ocupando de todo lo que tiene que ver con uno.

Pues bien, (frase prestada de Padre Ricardo), vamoa a esfozarnos por ser verdaderos creyentes y siempre estar llenos de gozo porque confiamos en el Señor, creemos en el Señor.

Vamos a demostrarle a todo el mundo que el Señor es todo lo que tenemos, el Señor es todo lo que necesitamos y el Señor es todo lo que deseamos.

Señor tu eres el Dueño y Salvador de mi vida.

Padre Ricardo, gracias, gracias y gracias. Le deseo pase un bonito Día de la Amistad

Anónimo dijo...

Estoy encantada con el nuevo Boletín Parroquial. Encuentro que contiene muchas lecturas que nos hacen crecer como personas y nos enseña a ser mejores cristianos.

Especialmente me gustaron muchos los articulos sobre el tema de la disculpa y el articulo de "Se valiente". En este artículo se habla sobre el miedo. Indica que el miedo es nuestro peor enemigo. A mi me abrió los ojos porque me enseñó que no debo tener miedo a hacer realidad mis sueños. Debo tratar, con la ayuda del Señor, conseguir y alcanzar todos mis sueños. No descansar hasta que ellos se hagan realidad. El Señor esta conmigo y se confio en El, lo lograré.

Padre Ricardo, usted es lo máximo. Espero y deseo que todos sus sueños se realicen lo más pronto posible. Le deseo lo mejor a usted y su familia; además estoy rezando para que el problema familiar que tiene se resuelva y que se cumpla la voluntad del Señor.

Padre Ricardo, sabe una cosa, le tengo envidia a la Hermana Mayra. Ella debe ser una persona muy especial.

Que el Señor lo bendiga.